Recordar también es resistir
Por Wirestock en Envato.
Más allá del glamour, la moda y la visibilidad que hoy abrazamos con orgullo, la comunidad LGBTQ+ nació como una respuesta urgente a la violencia, la marginación y la necesidad de existir con dignidad. Su origen es político, colectivo y profundamente humano.
En los últimos años, hemos visto cómo, dentro de la misma comunidad, emergen tensiones, divisiones y discursos que nos alejan del propósito común. A veces parece que hay una lucha LGBTQ+ vs. LGBTQ+, una fractura dolorosa que pone en duda nuestros avances y nuestras alianzas.
Este es un momento para detenernos y recordar: ¿De dónde venimos?, ¿por qué comenzamos a alzar la voz?, ¿hacia dónde queremos llevar esta lucha que también es historia, afecto y futuro?
El 28 de junio de 1969, en un pequeño bar llamado Stonewall Inn, nació una revolución. Mujeres trans, personas racializadas, disidencias sexuales y cuerpos no normativos respondieron con rabia y dignidad a años de represión. No fue una fiesta: fue una revuelta.
Hoy, más de 50 años después, ese eco sigue vivo en cada marcha, en cada abrazo, en cada lucha por existir sin miedo.
Que junio y todos los meses del año sean también un espacio para reflexionar y reconectar. Para que la manada se mire, se escuche, se cuide y se mantenga unida.
Porque ninguna letra de nuestras siglas sobra.
Escrito por Emmanuel Bracamonte.